¿Te imaginas caminar entre millones de luces, árboles gigantes resplandecientes y ciudades que se transforman en un cuento navideño? Este año hay rincones del mundo —y de México— que están llevándose toda la magia de la Navidad con sus espectaculares exhibiciones luminosas, perfectas para vivir en familia o con amigos.
Una parada obligada si piensas cruzar el Atlántico es Rockefeller Center, en Nueva York —un clásico navideño que nunca falla. Su inmenso árbol de aproximadamente 23 metros, cubierto por decenas de miles de luces, y la pista de patinaje a sus pies crean un escenario mágico en pleno corazón de la ciudad. Aunque haya nieve o no, el ambiente festivo no se compara con nada.
Si prefieres algo más cálido sin salir del mundo hispanohablante, Luztopía en Monterrey, México, es una excelente opción: con unas 15 500 luces y 200 figuras iluminadas —desde árboles hasta monumentos emblemáticos en miniatura—, el festival se despliega a lo largo del histórico canal del Paseo Santa Lucía. Su combinación de luces, música, ambiente festivo y clima templado lo hacen ideal si buscas una celebración navideña diferente y alegre.
Europa tampoco se queda atrás: el encantador parque de atracciones Tivoli Gardens, en Copenhague, transforma su lago, jardines y pasillos en un espectáculo de luces, música y fuegos artificiales cada diciembre, perfecto para recorrer en pareja o con amigos. Ciudades menos conocidas como Colmar, en Francia —con sus calles empedradas y casas de madera adornadas con luces y mercados navideños— ofrecen un encanto casi de cuento que hace soñar despierto.
Para quienes aman los planes de luces + naturaleza, en Norteamérica destaca Winter Festival of Lights en Niagara Falls (Ontario, Canadá). Sus miles de luces decoran rutas junto a las cataratas y parques, creando una experiencia mágica que combina naturaleza, paisaje luminoso y espíritu navideño.
Si prefieres algo íntimo, original y con olor a tradición, Canyon Road Farolito Walk en Santa Fe, New Mexico (EE.UU.) tiene su encanto: farolitos, velas y luces suaves envuelven las calles de adobe, invitando a caminar despacio al atardecer, sentir el silencio, disfrutar de la nostalgia y compartir un momento especial bajo miles de lucecitas cálidas.
En resumen: desde enormes árboles icónicos hasta canales iluminados, parques mágicos, calles medievales con luces cálidas o cascadas naturales bordeadas de resplandor —esta temporada navideña 2025 el mundo entero se convierte en un escenario iluminado esperando a ser explorado.








