En el rápido mundo de la música urbana, ha surgido un nombre que está dando que hablar: FlowGPT. Este proyecto, creado por el equipo de Bardinet, una empresa tecnológica española, ha cambiado la escena musical desde que empezó en 2022. Con un modelo de lenguaje preentrenado, FlowGPT se ha convertido en un fenómeno en las redes sociales, llamando la atención de los fans.
El primer salto a la fama de FlowGPT fue con la canción “Mi primera chamba”, una versión de “Si la calle llama”, originalmente interpretada por Bryant Myers, Myke Towers y Eladio Carrión. La versión de FlowGPT, que cuenta la historia de un joven comenzando su primer trabajo, se volvió viral en abril de 2023, con más de 100 millones de reproducciones en TikTok y se extendió por otras plataformas como Instagram y Twitter.
Este éxito, sin embargo, trajo polémica. Mientras algunos criticaron la falta de originalidad y la repetitividad de la canción, otros la elogiaron por su mensaje positivo y su ritmo contagioso. Incluso Eladio Carrion canto un fragmento de esta en uno de sus conciertos.
Pero no todo ha sido positivo para FlowGPT. El conflicto surgió con la canción “NostalgIA”, donde las voces de Bad Bunny, Daddy Yankee y Justin Bieber se mezclaron en un tema creado por FlowGPT. Bad Bunny, molesto por el uso no autorizado de su imagen y voz, expresó su descontento públicamente, generando controversia sobre los desafíos legales y éticos que rodean a la música generada por inteligencia artificial.
Este incidente resaltó la importancia de proteger la propiedad intelectual en la música generada por IA. La línea entre la creatividad humana y la automatización presenta desafíos, desde determinar la autoría de una obra hasta la posible pérdida de empleos en la industria musical.
Los problemas asociados con la automatización, la propiedad intelectual y la pérdida de diversidad musical son retos que deben abordarse. En medio de la revolución tecnológica, se proponen soluciones como el desarrollo de nuevas leyes y regulaciones, mecanismos para reconocer a los artistas humanos que trabajan con IA y la promoción de la diversidad musical en la creación algorítmica.
El futuro de FlowGPT es incierto, pero su potencial para cambiar la industria musical es innegable. A medida que la tecnología avanza, la música generada por IA continuará desafiando las ideas convencionales, y la industria deberá adaptarse para equilibrar la innovación tecnológica con la preservación de la creatividad humana. Parece que la música del futuro será una mezcla de ingenio humano e inteligencia artificial.